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8M2023. Por unas normativas a favor de una menstruación libre de tóxicos: equidad, accesibilidad y salud

El día 8 de marzo de 2023, Naciones Unidas quiere hacer un homenaje a las mujeres y a las organizaciones que están luchando por el avance de la tecnología transformadora y por el acceso de las mujeres a la educación digital.

Una tecnología transformadora y el acceso a la educación debe ir acompañada de una información independiente de los intereses económicos y que permita a la mujer un papel activo, tanto en la prevención de enfermedades como en la transformación de una sociedad más justa.

Las mujeres, más afectadas por los tóxicos

Multitud de estudios alertan de la toxicidad de un gran abanico de productos de consumo, especialmente en la industria del plástico en la que también se incluyen los productos menstruales. Según la investigadora del IDAEA-CSIC, la doctora Ethel Eljarrat, “la mayoría de productos que utilizamos a diario tienen compuestos químicos. Algunos pueden entrar en nuestro organismo y se van acumulando. Son disruptores endocrinos, neurotóxicos y pueden ser cancerígenos“. El doctor Nicolas Olea sigue: “Las principales víctimas de estos compuestos potencialmente cancerígenos son mujeres. Las mujeres desarrollan más enfermedades por culpa de este modelo productivo manchado de sustancias químicas peligrosas”.

Un ejemplo muy claro y simbólico son los productos menstruales. La doctora Elena Carreras, en una notícia de TV3 afirmó que “cualquier producto que esté en contacto con la piel o las mucosas debe ir perfectamente etiquetado para saber cuáles son sus componentes; que no haya ese etiquetado en los productos menstruales, es decir, que no se haga específicamente en materiales que son utilizados por mujeres, desde un punto de perspectiva de género, es totalmente denunciable”.

Así pues, con la falta de control sobre los tóxicos de los productos menstruales, se repite el sesgo de género que las mujeres sufren en la medicina. Según la doctora Carme Valls, “en la medicina como en otras ciencias, hay unos estereotipos de género que nos hacen invisibles. Si nos ven, nos consideran inferiores y casi siempre quieren controlarnos”. Y somos invisibles, en primer lugar, por la falta de investigación diferenciada por sexo y por la falta de perspectiva de género en el análisis de los datos sobre la salud.

Nuevo Periodo, la propuesta de Rezero para pasar a la acción

Por ello, con el programa Nuevo Periodo, Rezero ha desarrollado diversas actuaciones pioneras como el asesoramiento técnico en la redacción del Plan de Equidad menstrual y menstruación sostenible de la Generalitat de Catalunya; el manifiesto sangriento; las guías digitales para la ciudadanía y para docentes, y un directorio de productos menstruales reutilizables (que en la mayoría de casos no contienen tóxicos), entre otros.

El objetivo de Nou Període es facilitar información objetiva a las niñas, chicas, mujeres y otras personas menstruantes y promover una actitud crítica y activa en relación con la defensa de sus derechos menstruales. Y por eso contamos con la complicidad de colectivos feministas y ecologistas, escuelas e institutos e instituciones locales y supramunicipales, para contribuir a transmitir una mirada crítica.

Mucho camino por recorrer

Pese a la continua denuncia del mundo científico, de los grupos ecologistas y feministas y de una población joven muy activa, las normativas no están cubriendo la necesidad básica de proteger la salud de las mujeres en el tema de la menstruación. Hasta ahora, el Estado español ha rebajado el IVA de los productos menstruales dentro del paquete de medidas fiscales del año 2022. A pesar de este avance, no menciona ninguna medida a favor de la salud de las mujeres: ni sobre los productos menstruales reutilizables ni exigencia alguna de etiquetado y transparencia en la composición de los productos menstruales.

Por el contrario, parece que el actual gobierno de la Generalidad de Cataluña sí quiere incluir en la futura ley de residuos, tanto la eliminación de las sustancias químicas peligrosas y toxinas en los productos de higiene íntima, como la obligatoriedad de productores y envasadores de incorporar componentes químicos de forma específica en el etiquetado.

Normativas que velan por la salud de las mujeres

Algunos ejemplos de regulaciones que ya han empezado a aparecer para hacer frente a la problemática de los tóxicos en productos menstruales están en el estado de California, donde se han prohibido los PFAS (perfluoroalquilo y polifluoroalquilo) en productos menstruales o en Nueva York donde también han prohibido PFAS en las prendas, incluyendo ropa interior.

Por todo ello, el día 8 de marzo, Día mundial de la mujer, defendemos el derecho a un consumo sin compuestos químicos, especialmente aquellos que pueden afectar a la salud de las mujeres. En ese sentido, los productos menstruales son clave. Pedimos que el gobierno catalán siga con su propósito de vencer las discriminaciones que se han hecho hasta ahora con un tema tan delicado como son los productos menstruales y animamos a otras regiones a seguir su ejemplo.