Este indicador cuantifica la demanda europea de materiales (biomasa, minerales metálicos y no metálicos y materiales de energía fósil) para producir bienes y servicios destinados al consumo o al desarrollo de los hogares, gobiernos y empresas de la UE.
El consumo de materias primas, cuantificado en toneladas de materiales consumidas por habitante, permite visibilizar la responsabilidad de la UE en las presiones medioambientales en otras partes del mundo como consecuencia de los productos o materiales importados por la UE.