Los impuestos o canon sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y la coincineración de residuos, son instrumentos económicos que pretenden incentivar un comportamiento más respetuoso con el medio ambiente penalizando económicamente el destino de la fracción resto a tratamientos finalistas. Cualquier estrategia de gestión preventiva de los residuos realizada por los entes locales que comporte una reducción de los residuos llevados a tratamientos finalistas comportará un ahorro directo para los municipios. Por otro lado, incrementar la recogida selectiva también supone una mejora directa en el balance económico de la gestión de los residuos municipales, debido al incremento de los ingresos vinculados a los Sistemas Integrados de Gestión (SIG), el retorno del canon y la venta de material.
Evolución del destino de la fracción resto en Cataluña
Fuente:Agencia de Residuos de Cataluña
La tendencia general del destino de la fracción resto es la disminución progresiva de los destinos finalistas (incineración y depósito controlado) y el aumento del destino a tratamiento mecánico-biológico. Aun así, la recuperación máxima de materiales para su posterior reciclaje a las plantas de tratamiento mecánico-biológico nunca ha superado el 40%.