Actualmente, los productos menstruales de un solo uso (compresas y tampones desechables) siguen siendo la opción más utilizada entre las personas menstruantes, a pesar de las múltiples alternativas reutilizables que existen (copa menstrual, compresas y calcetas reutilizables, esponja menstrual).
Los productos menstruales se caracterizan por tener una durabilidad muy baja y una complejidad de reciclaje muy elevada, hecho por el cual, son recogidos y tratados con la fracción resto o, en el peor de los casos, abocados al entorno natural. Aun así, estos productos no están sujetos a ningún sistema de responsabilidad ampliada del productor (RAP).